Partieron todos en horas de la madrugada desde Milán hasta Sicilia y en horas de la tarde llegaron.
Kara está agotada, así que se va a la habitación que comparte con el Don para tomar una siesta.
El Don se dirige a su despacho, donde se pone en contacto con algunos de sus socios y así invitarlos a su boda. La boda será pequeña, con los conocidos del Don y Fer, que son los mismos de Tamara.
—Don, no quería decirte esto, pero se envió un reporte de desaparecida de Kara hace unos meses atrás. ¿No crees que quiera tener a esa persona que se preocupa por ella a su lado en el día más importante de su vida? —cuestiona Fer.
El Don lo mira por unos minutos y piensa en eso.
—Encárgate de que esa persona esté aquí para mañana temprano.
Fernando asiente y hace algunas llamadas para que esa per
