Las entrenadoras empiezan haciendo algunos ruidos y en eso llegan dos delfines, una de las entrenadoras me dice como puedo acariciar al delfín que tengo frente a mi, y cuando lo hago parece que él me sonríe. Empiezan a bailar frente a nosotros y Brett no me quita los ojos de encima, creo que mi sonrisa es tan grande que más tarde me dolerá la quijada. —Él es Mark y ella es Nani—dice la entrenadora señalando cada uno mientras los delfines hacen piruetas a nuestro alrededor. Mark se acerca a mi y lo tomo de la aleta, me lleva a dar una vuelta y me trae de regreso, lo mismo hace Nani con Brett. —¿Te gustó la sorpresa?—pregunta Brett sonriendo. —Me encanto, es increíble. Me da un beso y en ese momento Mark se mete en medio de los dos y me da un beso, Brett y yo no dejamos de sonreír, p