Mi mamá pasa a cenar esta noche, así que estoy preparando todo para la velada, aunque tengo los pensamientos más concentrados en Lucas que en lo que estoy haciendo. Cuando nos encerramos a trabajar en la habitación, lo primero que hizo fue besarme con más pasión que la primera vez y no podíamos parar, pasamos más tiempo besándonos que trabajando y siento que eso nos va a retrasar muchísimo, pero es inevitable. Sus labios son como un imán para los míos, y su cuerpo es un campo magnético.
Por ahora preferimos que no pase nada más que unos besos, porque ambos sabemos que eso sería un inconveniente si nos llegan a agarrar. ¿Cuánto podremos aguantar? Nuestra atracción es demasiado fuerte y creo que de esta semana no pasamos.
Por otro lado, creo que Alejandro va a empezar a sospechar sobre
