Narra Héctor
Estábamos todos en el comedor, cuando vimos bajar a mi hermana con Ximenita en brazos y a mí cuñado.
–Buenos días– saludan.
–Buen día, ¿Cómo durmieron?– preguntamos.
–Muy bien, la bebé no despertó en toda la noche, le cambié el pañal como a las cinco– dijo Lisa.
–Que bueno, nosotros también dormimos muy bien– decimos gentilmente.
–Vamos a poner el pino de navidad– comunica mi Mich alegre.
–Si, que emoción–dijeron mis hermanas, mientras soltaban unas palmaditas, mis cuñados y yo no pudimos soltar una enorme carcajada por su actitud de niñas chiquitas así las amamos.
Al finalizar de desayunar nuestras chicas se pusieron a adornar el árbol navideño, nosotros nos fuimos a jugar billar al cuarto de juegos.
Horas mas tarde nos fuimos al boliche, las niñas se quedaron con Pa
