[KEIRA]
Al día siguiente: 23 de noviembre
No voy a negar que llegar a la casa con el cabello mojado a la diez de la mañana para poder cambiarme de ropa y ser sometida a las miradas llenas de comentarios internos por parte de mi hermana no ha sido vergonzoso, pero no me quedo otra opción más que ignorarla e ir a cambiarme de ropa. Después de despedirme de Dane vine a la empresa, y aquí estoy terminando de prepararlo todo para mi reunión cuando alguien llama a la puerta.
—¡Adelante! — Digo alto y ni siquiera miro quien entra.
—Keira, ¿podemos hablar? — Escucho su voz, y me toma un instante caer en cuenta de que realmente él está aquí.
Miro directamente a sus ojos café y él juega con su cabello dorado mientras se acerca a mi escritorio —Mauricio, tú y yo no tenemos nada de que hablar, cr
