Capítulo 10.
Maxine temblaba mientras que Derek la veía con intensidad, intensidad que a la pobre no le gustaba en lo más mínimo.
—Escuche. Vayamos al doctor— dijo Maxine tratando de encontrar una solución a su problema.
—¿Cómo para que?.
—Pues para que lo revisen.
Derek resopló y se quedo pensando, era cierto, le resultaba extraño que de un día a otro no hubiera nada más en su cabeza que esa chica a la cual él consideraba un desastre total, hasta el día de ayer, ella no le agradaba, ante sus ojos no era la mujer más agraciada, pero, no podía dejar de pensar en sus ojos, en sus labios rojos, en su sonrisa, en su torpeza que más que irritarlo, le gustaba, lo admitía, ella le gustaba, desde esta mañana fue muy claro para él, y la necesitaba, la quería y también quería que él sentimie
