*Julieta* El domingo llega y pasa sin problemas. Cuando llega el lunes, mis nervios empiezan a empeorar. Estoy nerviosa por volver a ver a Logan y muy nerviosa por mi cita con Eric. A primera hora de la mañana, recibí una llamada del taller automotriz local diciéndome que habían remolcado mi auto y que estaban trabajando en él. Me sorprendí cuando recibí la llamada, pero expresé mi inmensa gratitud. Parece que están cuidando mi coche a petición de Logan. Supongo que tendré aún más que agradecerle cuando lo vea más tarde. Logan y su equipo aparecen a la hora habitual, pero Logan encuentra todas las razones para evitarme. Supongo que a mí también me funciona. Tampoco estoy seguro de qué le diría. En cambio, decido quedarme en el dormitorio principal y trabajar por mi cuenta. Paso algunas