No saco de mi mente lo que ha pasado más temprano. Cada vez que King y yo estamos a solas en un espacio, entramos en erupción y ya no hay manera de negar la atracción que hay entre los dos. «Y, creo que lo de hace un rato ha dejado eso claro». Blue me observa con los ojos entrecerrados mientras firmo los documentos que ha traído. Pero sé que es una excusa porque ella tiene curiosidad. «Como si no la conociera». Por algo ha llegado antes de la hora del almuerzo y me estudia mientras come de una bolsa de snacks. —¿Es todo? ¿Necesitas algo más? —Inquiero, cerrando la carpeta y tendiéndosela. —Sí —toma asiento. —Quiero que me digas, ¿qué pasó con King después de que Andrea saliera echando fuego por la boca como una dragona? —Blue. —La amonesto, pero ella solo me da una sonrisa de dientes.