POV. Blue.
El viento frío de la ciudad se cuela por las calles, anunciando la llegada del invierno. Camino con paso seguro hasta la puerta de El Delight, el elegante restaurante de André. Había pasado un par de días desde la última vez que crucé su umbral y es que hemos tratado de mantenerlo relajado. Ignacio, el maître, que suele ser protocolario, estrictamente formal en sus gestos y saludos. Pero esta vez, en lugar de la típica inclinación de cabeza o no permitirme la entrada como la primera vez, simplemente se hace a un lado y me dedica una sonrisa de bienvenida. Respondo con un leve asentimiento y cruzo la puerta con naturalidad, como si hubiera estado entrando aquí todos los días de mi vida.
El contraste entre la calidez del interior y el gélido exterior hace que me quite el abri
