[Amelie] Definitivamente, Julien es insufrible y no sé cómo he sacado fuerzas para no saltarle encima y ahorcarlo con mis propias manos, en especial cuando sale con comentarios o actitudes, que demuestran la persona prejuiciosa y prepotente que es. Regreso al escenario y todos me miran precavidos, así que les regalo una sonrisa amable, para que se tranquilicen, pues es normal, que con esa forma de haber llegado de Julien. —¿Hay algún problema? —me pregunta Arnold y yo niego. —Todo está perfecto, no hay nada de qué preocuparse —contesto, mientras giro un poco hacia Julien, quien se quedó en la parte de atrás y observa todo en silencio —. Les presento a Julien Dubois, uno de los dueños del Teatro —les comento en forma de presentación, aunque decir esas palabras hace que mi lengua piqu