Se está muriendo.
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Murat solo miraba a Melisa mientras que Moisés trataba de detener el sangrado de su nariz, nada había resultado bien, Murat odiaba que las cosas se fueran por otros rumbos.
—¿Ya lo has decidido?.
Melisa lo miró y asintió. —Si, así es.
—Pues bien— dijo Murat y solo dio media vuelta. Ella estuvo a punto de detenerlo, pero decidió que así era mejor, él debía de calmarse y ella también y tal vez luego podrían hablar.
A la mañana siguiente Melisa preparaba su renuncia como era debido, tenia que devolverle las llaves del departamento a Murat y darle las gracias, eso era lo que debía de hacer por que era lo correcto.
Al llegar a Tourell recibió un mensaje de Moisés.
“—Nuestro vuelo sale a las 3 de la tarde.”
Melisa respiró hondo y subió en el elevador, al
