[ANAHÍ]
Ya esta anocheciendo cuando finalmente Deo y yo entramos a casa después de lo que pareciera haber sido una eternidad en el hospital, y por alguna razón, él prefirió que Bianca pasara la noche en casa de sus padres según él que para que yo pudiera descansar bien… Me trata como a una muñequita de cristal, me ayuda a caminar, a sentarme en el sofá, luego va, prepara nuestro cuarto, regresa por mi y con cuidado me lleva a la habitación para que me cambie, pero de inmediato niego.
—No me iré a acostar si no me ducho— Amenazo y él me mira como regañándome.
—De acuerdo, vamos, de todas maneras, es hora de que empiece a practicar— Me dice mientras que me ayuda a ir al baño.
—¿A practicar para que?— Pregunto y se sonríe.
—Estuve leyendo por ahí que después del parto te voy a tener que
