Adler
No creí que la persona que tocaría mi puerta sería él, ni mucho menos que se atreviera a hablarme por primera vez tan… no sé, no tengo una palabra que abarque todo lo que muestra en el momento. Le di una señal para que tomase asiento frente al escritorio y él cierra la puerta con llave, aunque no digo nada al respecto.
—¿De qué quieres hablar? —pregunté a la defensiva.
Es impresionante ver a Nicolay frente a mí sin ser el despiadado mafioso de la Bratva, tampoco el hombre implacable que hará lo que sea para mostrar a otros que Ragnar le pertenece, ni mucho menos el padre sobreprotector que asesinaría a cualquiera que lastime a sus hijos.
—No te pediré perdón por lo que hice Adler porque no soy esa clase de hombre y lo sabes bien, jamás me rebajaría a ese nivel excepto con mi fami
