Capítulo 29: Moiras a vhn x 27 Hace dos semanas: Era una habitación blanca y segura, en un sótano desangelado propiedad de Moiragetis Holdings. Las tres mujeres estaban encaramadas en sus pedestales de mármol, murmurando y enhebrando el flujo de información. Las mujeres, vestidas de blanco, estaban avejentadas. Su pelo fino apenas crecía, movían sus frágiles manos, sacudiéndolas, como manejando el aire a voluntad. Haces de fibras ópticas brillantes y relucientes se conectaban a sus espaldas, directamente en sus columnas vertebrales. Las enlazaban con el servidor de la habitación de abajo, una supercomputadora secreta con un propósito singular. Sus ojos eran de un blanco vidrioso, pues no podían ver en el sentido convencional. Sus nervios ópticos habían sido desviados al flujo de dato