Gire para ver de quién se trataba y me encontré con el hombre gigante . . .
- ¿ Niña, te puedes quedar un momento ? . . . - Su voz retumbó en el silencio y estaba a punto de negarme cuando dijo . . .
- Parece que eres fuerte y tienes experiencia en este tipo de trabajo, a pesar de que eres una niña . . . -
Parecía que el hombre decía las cosas para tratar de sacar información de si era menor de edad . . .
Saque mi billetera del bolsillo y la abrí para dejar ver mi identidad . . .
- ¿ Ahora está tranquilo ? . . . -
Parecía que debía comenzar a usar maquillaje, de lo contrario todos me tomarían por niña . . .
Él, miro mi identificación con detenimiento y luego dijo . . .
- Es un delito falsificar documentos . . . -
- ¡ Ja ! . . . - Me burle sin piedad . . .
- Mira, ya mostré lo que buscabas, no espero que me creas, sin embargo, me has seleccionado para trabajar a tu lado . . .
¿ Quieres mi registro de nacimiento ? . . . -
Claro que eran documentos falsos, y me gustaba que este hombre no fuera un tonto . . .
Pero era una experta en falsificación, era imposible que incluso la policía pudiera ver que el documento era falso . . .
El hombre lo pensó por un tiempo . . .
- Quiero la verdad, si algo llega a pasar no puedo ayudarte en ese caso . . . - Hablo seriamente . . .
- ¡ Vaya ! . . . ¿ Quieres cuidarme ? . . .
Me siento halagada, pero no tengo nada que decir más que necesito el trabajo . . . - Lo mire directo no mostrando signo de cobardía en ningún momento . . .
El gigante al fin se rindió y suspirando dijo . . .
- Soy Héctor, puedes llamar al mismo número de la entrevista si pasa algo, nos vemos mañana a la misma hora para entrega de uniformes y puestos . . . -
Asentí con la cabeza, di la vuelta y me fui . . .
¿ Que se creía ese hombre ? . . .
¿ Mi padre ? . . .
Eso fue todo . . .
Llegué hasta la entrada del complejo universitario y había otro vigilante, pero me dejó pasar enseguida, solo espero que no sepa quién soy y actúe anormal . . .
Fui hasta el apartamento y al entrar encontré a dos chicas arreglándose, el desorden de mi vida . . .
Se maquillaban, corrían de un lado a otro, había ropa por todas partes . . .
" Mierda, es por esto que me gusta la soledad . . . "
Pensé ignorando a todas y pasando hasta mi habitación . . .
Me alegraba que pudiera poner seguro y nadie podía ingresar a esa habitación sin mi autorización . . .
" ¡ Haaaaa ! . . .
Chicas tontas . . . "
¿ Por que es que hago esto ? . . .
No había caído en la cama, cuando sentí unos toques en la puerta . . .
Maldije tantas veces que lo olvide . . .
Me gire para abrir la puerta y encontré una chica de piel morena, sonriente y con labios muy, pero muy rojos . . .
Ambas nos quedamos mirando . . .
Al final fue ella la que no pudo contenerse y sin duda alguna me preguntó . . .
- ¿ Cuántos años tienes ? . . . -
- 14 . . . - Le respondí enseguida . . .
Parecía no haber esperado mi respuesta, me hizo una pregunta, yo solo le respondí . . .
- ¿ Y que haces aquí ? . . . ¿ Llegaste con tu hermana ? . . . - Me volvió a preguntar . . .
-¡ Ja ! Soy Leila, compañera de cuarto . . .
Imagino que por alguna razón que desconozco me estás buscando . . .
¿ Algún motivo ? . . . -
Me cruce de brazos y me le quede mirando fijamente a los ojos . . .
Su vestido lila, se pegaba a su cuerpo tanto, que parecía que le iba a explotar los órganos internos . . .
Y ni que hablar de sus pechos . . .
¡ Joder ! . . .
Me estaba desarrollando, pero sin duda me gano, tenía unos pechos que vaya, quede impresionada, pero no lo demostré . . .
Su color de piel me parecía muy bonito, como un chocolate brillante y cremoso . . .
Elevé mi ceja, al ver que ella lo decía nada . . .
- Debes ser una chica prodigio, a tu edad, yo apenas y avanzaba en bachiller, con decir que a puras penas conseguí graduarme y entrar a la universidad . . . - Me contesto mientras estiraba sus labios . . .
Sentí repulsión, este tipo de chicas no me eran de mi agrado, de seguro era una de las típicas chicas tontas . . .
- como sea, fue una buena historia, si no es más, permiso . . . -
Estaba por cerrar la puerta, cuando me dijo . . .
- Seremos compañeras por mucho tiempo . . . Soy Pamela, estoy en el cuarto de al lado, toda la universidad fue invitada a una fiesta de bienvenida ¿ No piensas ir ? . . . -
Lo que me faltaba . . .
¿ Fiesta ? . . .
- Que les vaya bien . . . -
Fue la única respuesta que le di, antes de cerrar la puerta con un golpe seco en su cara . . .
Volví a la cama y tome mi celular . . .
Faltaba poco para mis cumpleaños . . .
Mire que tenía unos 18 mensajes de Pedro . . .
Debe estar preocupado . . .
Estaab por abrir el chat, cuando sentí nuevamente golpes en mi puerta . . .
¿ Qué mierda ? . . .
Me levanté y abrí la puerta . . .
Era nuevamente la Pamela . . .
Me cruce de brazos y espere la siguiente palabra . . .
- ¿ De verdad tienes 14 ? . . . -
Mierda, he Sido testigo de tantas cosas en mi vida . . .
Pero era ala primera vez que viviría rodeada por tanto tiempos de chicas de verdad tan tontas, iniciando por esta . . .
- Es mi problema si lo crees o no, también puedo tener 18, no importa cuántos tenga, de todas formas ya estoy aquí . . . - Respondí y quería volver a cerrar la puerta . . .
Sin embargo, sentí que alguien invadió mi espacio, se engancho de mi brazo, dió la vuelta conmigo, y luego dijo . . .
- Genial, entonces escogeremos tu mejor pinta, los chicos está noche de en estar que arden, si eres universitaria sabes de lo que hablo . . .
Sexo, alcohol, humo, sexo y más sexo . . .
Te ayudaré . . . -
La mire que fue hasta el armario para ver más que algunos trapos . . .
- ¿ Solo tiene esto ? . . . - Arrugo su cara, mientras alzaba uno de mis shores . . .
Se lo quité de la mano y lo volví a poner en su lugar . . .
- Espero disfrutes de tu fiesta . . . Creo que fuí muy clara cuando dije " que te vaya bien " . . . -
Se dije esto señalando la puerta . . .
- ¿ What ? . . . Ni lo sueñes . . . Iré por unos de mis vestidos, no te dejaré morir . . . -
Su sonrisa fue tan amplia que a mí me dolió la quijada por ella . . .
Era muy insistente, pues salió hasta la puerta, le dijo algo a otra chica que llamo y volvió a sentarse en mi cama . . .
- No pienses que voy a salir para que te encierres en estás cuatro paredes . . .
Por Dios . . .
Ahora somos universitarias, debemos gozar la vida mientras podamos . . .
Luego entraron dos chicas más . . .
- ¡ Hola ! . . . Ya estoy lista . . .
Yo soy Andrea, soy una de tus compañeras . . . - Dijo una chica bajita, acuerpada, y con ojos café espeso como en chocolate . . .
- ¿ Qué tal ? . . .
Yo soy Tera . . .
Te dejaré irreconocible . . . - Hablo otra chica blanca como mi piel, sus ojos eran albinos, y su cabello de color cobre rizado . . .
Era tan bella, que no pude evitar quedarme mirando las pecas de sus mejillas más de la cuenta . . .
- Lo sé, soy muy sexy, ahora haremos que tú quedes igual . . . - Dijo la misma chica, y luego de eso caí en las manos de esas tres chicas sin poder intervenir . . .
Por pri.era vez me sentí usada . . .
Ellas manejaban mi cuerpo, mi rostro, mi cabello a su antojo . . .
Todas metían manos y no pude ver nada de lo que hacían, ya que no tenía espejo ni nada en que verme . . .
Al pasar una hora . . .
Las tres se pararon frente a mi y sus ojos y boca eran de pura incredulidad . . .
- ¿ Qué ? . . . ¿ Van a actuar como tontas ? . . . - Les pregunté, ya que no dejaban de mirarme . . .
- Somos muy buenas en esto . . . - Dijo una Pamela . . .
Tera levantó los pungares y añadió . . .
- En realidad no hicimos mucho . . . Esta mujer tiene belleza propia. Cómo nosotras . . . -
- ¡ Ahhh que envidia ! Eres tan bella . . . ¿ Y así pensabas perderte la fiesta ? . . . Serás el centro de atención de . . . -
Estaba por decir Andrea, pero la detuve . . .
- No quiero ser el centro de atención de nada, incluso si pueden ignorame podré ir, de lo contrario es mejor no salir . . . -
No quería llamar la atención, ese no era mi propósito, hago esto para tener una vida tranquila, si me vuelvo el centro de atención ¿ Cuál es la diferencia ? . . .
- ¡ Oye está bien ! . . . Nosotras nos encargamos . . . - Dijo la morena . . .
No dije nada más . . .
En realidad no soy experta en universidades, mis estudios siempre fueron más bien privados . . .
Suspiré sin poder creer lo que estaba por hacer . . .
- Vamos . . . - Les dije levantándome y tomando mis cosas . . .
- ¿ Y no quieres ver un poco de nuestra magia ? . . . - Dijo Tera cómo esperando que les agradezca . . .
Fuí en busca de un espejo y cuando lo encontré . . .
De verdad que ahora entendía lo que decían . . .
Yo misma me había maquillado para mis anteriores misiones en busca de aparentar la edad que necesitaba . . .
Pero ahora . . .
Esto es mucho más . . .
¿ De verdad era yo ? . . . Me pregunte . . .
Tenía un vestido amarillo quemado de cuello medio y malga largas . . .
Me quedaba un poco más arriba de las rodillas, pero si me llegaba a agachar, sin duda se me vería hasta el alma . . .
Mi cabello estaba liso, pero con ondas grandes, dándole volumen a mi cabello . . .
Suelto y con partes callendo a cada lado de mi rostro . . .
Mi rostro . . .
Ese era la mejor parte . . .
El maquillaje era exquisito, resaltaba lo fuerte de mi mirada, mis ojos tenían una profundidad atrayente . . .
Mis labios estaban moldeados como si fueran más anchos . . .
Un color ocre y palo de rosa que daban un toque genial . . .
A lo que si pude negarme fue a los tacones . . .
Me puse hasta el cansancio y terminé poniéndome mis tenis que delataban mi estatura . . .
Al final se rindieron y terminaron por dejar que me los ponga . . .
- Buen trabajo chicas . . . - Dije luego de observarme y me gire a ver la sonrisa brillante que tenían cada una de ellas . . .
- Mi mejor trabajo . . . - Dijo Tera . . .
- Mi obra de arte . . . - Siguió Andrea . . .
Pamela de me quedo mirando y solo me guiño un ojo . . .
- La fiesta nos espera . . . Y los chicos guapos también . . . - Dijeron Pamela y Tera complementando la frase una después de la otra . . .
No sé, pero me daba la sensación que se conocían desde hace tiempo y muy bien, entre ellas parecía haber una confianza y una complicidad más allá de la que podían tener unas chicas que apenas y se conocen . . .
Tenía la típica idea de que sería incómodo al principio, y que cada una se metería solo en lo suyo . . .
Si que me equivoqué . . .
Salimos del apartamento, no tenía ni idea hacia donde íbamos . . .
Pero ya estaba todo sobre rueda . . .
¿ Que más podía hacer ? . . .
Solo llegar a la dichosa fiesta . . .
Varios coches y motos nos pitaban a medida que llegabamos al lugar y mis compañeras de piso hablaban emocionadas de una cantidad de estupideces que me tenían sin cuidado . .
No me incluí en su plática de principio a fin . . .
Establos por pasar una calle, pero sentí que el celular estaba timbrando, así que me quedé un poco atrás para mirar de que se trataba . . .
Pero antes de poder mirar algo, sentí un ruedo insistente en la calle y luego de girar, la luz enseguida cubrió mis ojos . . .
- ¿ qué mierda ? . . . - Grite cuando sentir el rodeo en mi rodilla que estaba cubierto por un pequeño parche . . .
Estaba estrechada por el cuerpo de alguien . . .
Pero por el olor de su perfume, parecía ser un hombre . . .
Me apretó con fuerza y luego me soltó, me dejó estabilizada y sin decir nada más se fue . . .
Solo mire su espalda, estaba por decir algo, pero las chicas llegaron hasta mi, y me revisaron de pies a cabeza como buscando su me faltaba algún pelo . . .
Luego escuché los insultos de parte de ellas hacia alguien . . .
Era un chico que estaba en una moto . . .
Se miraba algo asustado, parecía que había estado a punto de atropellarme, si no fuera por la persona que me salvó y no me dejó darle las gracias . . .
Todo se volvía cada vez más raro desde que llegué, pero no podía unir las piezas de que era lo que me parecía raro en todo eso . . .
Lo ignore, me acerque al chico de la moto y le dije . . .
- Ten más cuidado, está es una zona llena, no puedas andar de forma imprudente . . . - No agregue más nada y me fui con las chicas detrás diciendo un montón de cosas acerca de denunciar que no me importaba . . .
Había venido a una fiesta, después de ver a ese chico, estaba mucho más interesada en la fiesta . . .