* * * * * Dreik Black * * * * *
Camine hacía la base de seguridad de la mansión, hacia mucho que Juan no volvía y ya me estaba desesperando . . .
- ¡ Jefe ! . . . - Todos saludaron con respeto cuando me miraron llegar, sin embargo, yo no estaba mirando a la persona que buscaba . . .
Juan Giova se me acercó lentamente para decirme . . .
- Jefe, no pudimos encontrala, está vez no estaba ni siquiera por los alrededores de la villa . . .
Jefe lo siento . . . -
Juan Giova suspiro, sin embargo, en segundos sintió como el aire parecía condensarse y se volvía caliente, sabía que no perdonaba errores, por eso tenía al mejor grupo de guardas entrenados en las más altas elites de la milicia, no era cualquier personaje al que se le podía escapar, incluso eran profesionales en espionaje, investigación, rastreo . . .
¿Cómo es que no podían dar con mi esposa ? . . .
Simplemente no lo podía entender . . .
El infierno parecía emerger en la tierra en segundos . . .
Juan Giova no tuvo el valor de alzar el rostro para mirarme, sentía que si lo hacía su alma sería absorbida con tan solo un soplo y no estaba muy lejos de la realidad, estaba tan enojado que podía enviarlo al infierno en ese instante . . .
- ¿ Lo sientes, eh ? . . .
¿Ustedes también lo sienten ? . . .-
Incluso hombres corpulentos tan bien entrenados cómo ellos, no pudieron responder ni levantar su mirada . . .
Lo sabía, y no pude evitarlo, parecía que me estaba convirtiendo en un demonio a cada segundo que pasaba . . .
La ira envolvió mis sentidos, el pecho se me apretaba . . .
Ella estaba embarazada, si le llegaba a suceder algo a mi hijo o a ella, todos estarían en serios problemas . . .
- ¿ A qué están esperando ? . . .
¿ Quieren que yo la vaya a buscar ? . . . -
El rugido que salió de mi garganta fue espeluznante, haciendo que mis hombres corrieran a emerger un plan para encontrar a mi esposa . . .
A veces me asustaba de mi mismo, pero este soy yo, está es mi personalidad, y para sobresalir en este mundo, solo podemos vivir de esta forma, o temes o te temen, no hay otra forma de sobrevivir . . .
Juan Giova, como siempre se quedó esperando para que le diera nuevas indicaciones, él siempre ha sido mi mano derecha y ya estaba acostumbrado a ciertas situaciones, aunque está estaba cada vez peor, y de verdad le aterraba lo aterrador que podía llegar a ser, lo sé, y se que soy muy duro con él, cuando es más que mi subordinado, es mi mejor amigo . . .
Tengo muchas amistades, pero Juan Giova, aparte de ser mi guarda, mano derecha y aliado especial, también es mi amigo . . .
Nos conocimos cuando estaba de ingreso en la elite de servicio militar en Inglaterra, en una de nuestras misiones . . .
Yo estaba de espaldas y recibí un balazo en la pierna, y cuando estaban a punto de darme otro tiro, fue Juan Giova quien se interpuso recibiendo la bala por mi . . .
Desde entonces fuimos inseparables, Juan Giova siempre tuvo la intención de servirme en todo momento, conocía mis avances, sabía que era un hombre de negocios . . .
Después de conocerlo por un tiempo en los entrenamientos, aunque no dejaban utilizar aparatos electrónicos, siempre me llegaban montones de papeles y archivos, por revisar . . .
Juan Giova miraba que siempre estaba en silencio y distante de todos, nunca me unía a ellos, no salía en los permisos y tampoco socializaba con nadie, parecía ser un típico ermitaño, y en realidad lo era, no me gustaba estar rodeado de personas que no me interesaban . . .
Luego dejaba mi autógrafo en la cantidad de papeles, los organizaba y al siguiente día los volvía a enviar, era increíble la capacidad que tenía para revisar y reciclar, sin duda era un gran hombre de negocios . . .
En ocasiones ni yo mismo me creía lo que me envolvía, mi genio era demasiado volátil y no había quien me aguante, por lo mismo solo servía para dar órdenes y no para recibirlos . . .
Mi padre, es un claro ejemplo de ello . . .
Jamás me gustó deberle a nadie, por lo que arreglé una gran cantidad de dinero que fue depositado a la cuenta personal de Juan Giova sin siquiera mencionarlo . . .
Era una suma de 10 dígitos, algo que nunca había existido en su cuenta ya que Juan Giova fue siempre un hombre solitario, su padre murió cuando él era muy joven y tuvo que ayudar todo el tiempo a su madre, era hijo único por lo que solo dos personas, no era una carga tan pesada . . .
Pero cuando su madre consiguió a otra persona las cosas cambiaron y él con el fin de buscar otra vida, se presentó en la milicia general de su pueblo, pero por cuestiones de la vida estaban reclutando para la agencia elite de la milicia de Inglaterra, él vivía en el sur, pero ir a la capital sería algo nuevo y estaba dispuesto a irse, después de todo, su madre ya estaba empezando una nueva vida en la que al parecer, él ya no era parte . . .
Juan Giova, siempre trabajo duro para salir adelante, en trabajos de cargas pesadas, por lo que su cuerpo se ejercitó rápidamente y su tamaño no era pequeño, por lo que lucía como un hombre corpulento y grande . . .
Su pecho era increíblemente fuerte y lo fue aún más con el entrenamiento militar, sus razgos eran preciosos y actuaba de manera formal y pulcra, podía igualarse un poco a mi cuerpo, pero jamás me igualaría, no es soberbia, es realismo . . .
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* * * * * * ( ACTUALIDAD ) * * * * * *
Narración en tercera persona
Dreik Black era un hombre de enseño con un rostro y cuerpo envidiable, pero cualquiera abandonaría eso ante la forma de ser tan fría y prepotente . . .
- ¿ Esperas una invitación ? . . .
¿ Por qué no has ido a buscarla con ellos ? . . .
Eres su líder y sin embargo, estás aquí con la cabeza agachada . . .
Si a mí esposa le llega a pasar algo . . . -
Al decir esposa, Dreik Black sintio cierta frescura en su boca, jamás la había llamado de esa forma, pero ese preciso día comenzó a adueñarse de ella, ahora sí creía que era su esposa firmemente y su rostro mostró cierta suavidad cuando enlazo la palabra con el hermoso rostro de su esposa . . .
- Olvídalo, solo dile que la encuentren, aunque el doctor la reviso y dijo que solamente era desolación y cansancio, mi esposa tiene algo y los exámenes para descubrirlo, no pueden esperar . . . -
Dreik Black, giro en sus talones y salió de la base en su villa . . .
Juan Giova respiro hondo, parecía que había perdido el hábito de respirar todo el tiempo que estuvo en presencia de su jefe, ahora que se fue parecía haber vuelto a la vida y sus pulmones recibieron y soltaron el aire que necesitaban, su ritmo cardíaco comenzó a latir, aunque todavía rápido y furiosamente, al menos ya daba signos de vida . . .
Dreik Black, volvió a su estudio y miro el diario entreabierto sobre su escritorio . . .
Era como si el libro lo atrajera hacia el, deseaba leerlo y no alejarse hasta terminarlo, pero era realmente espeso y aunque podía leer rápidamente, está vez quería detallar letra por letra y párrafo por párrafo cada contecimiento que se relataba en sus páginas, tenía la necesidad de leer y releer cada evento para poder recordar y entender todo lo que esposa vivió y él . . .
Él lo olvido . . .
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( Relato, Diario de Leila )
Papá nos estaba esperando en el coche, el señor Tomás, salió a recibirnos y una sonrisa enorme se dibujo en sus labios cuando me miró . . .
- Señorita, cómo ha crecido, está usted muy hermosa . . . -
El señor Tomás, tenía alrededor de 45 años, siempre fue el chófer de la familia y creo que siempre ha sido el de mi padre, ya que eran viejos amigos, era mayor que mi padre solo por un par de años, pero al parecer fueron amigos desde jóvenes y mi padre lo ayudo a trabajar en la familia . . .
Al principio no fue chófer, pero cuando era joven de convirtió en el mejor amigo de mi padre y chófer al tiempo, ya que como iban a todas partes juntos, mis abuelos decidieron contratarlo cómo su chófer y así podrían andar sin necesidad de que el señor Tomás pidiera permiso para ir con él todo el tiempo, además de que su familia pasaba por un mal tiempo y el trabajo le sirvió mucho, más cuando era como un paseo con mi padre todo el tiempo . . .
No fue para nada un trabajo . . .
En fin me acerque al señor Tomás y le di un gran abrazo al cual el respondió con sorpresa y su cuerpo se tenso al momento, pude sentirlo, pero solo quiero jugar un poco con el viejo, no es que este interesado en una niña que ve como a su hija . . .
- Usted tampoco está muy viejo señor Tomás, ya debería pensar en casarse, mi padre no le dará hijos . . .
¡ Ha ! No me vuelva a llamar señorita, aunque casi nunca estoy, usted sigue siendo como mi tío, no olvide mis palabras, es un hombre muy apuesto, esas tres canitas se le ven genial . . . -
Comencé a reírme al ver que el hombre se ponía tan rojo como un tomate . . .
Era un hombre alto y tenía buen cuerpo ya que siempre conducía con ropa informal, mi padre no le impuso un uniforme, por lo que se miraba más joven de lo que era, pero nunca se casó y tampoco tiene hijos . . .
Cada quien en su mundo . . .
- Deja de jugar con el pobre hombre y sube al carro. Tomás lo siento mucho, parece que esta niña ya está entrando a la edad en dónde cree que puede jugar con nosotros . . . -
Mi padre hablo severamente pero sus ojos decían otra cosa, le di un beso al señor Tomás en su mejilla antes de subir al coche y mi hermano Fer me dió un golpe con su dedo en la frente . . .
- ¡ Auch ! . . . - Me queje fingiendo estar adolorida hasta la muerte . . .
En realidad sí me dolió un poco . . .
- ¿ Qué es lo que aprendes en esas escuelas por el mundo ? . . .
Ya parece que tú profesion está cambiando a casamentera . . . -
- Ja ja ja . . . -
Me burle sin piedad de las palabras de Fer, yo de casamentera sería todo un chiste, no puedo encontrar a la persona que me gusta . . .
¿ Cómo puedo buscar pareja para otros ? . . .
- Deja a la niña, disfruta la vida mi princesa y no te preocupes por nada, para eso está papá . . . -
Aunque sus palabras calentaban mi corazón, mi padre siempre me decía lo mismo desde pequeña, bueno desde más pequeña . . .
Muchas veces creo que sí no fuera tan madura sería una chica sobre consentida, sería como una especie de chica mala, pero mi intelecto es maduro al punto de no caer en ese tipo de personajes, era una chica poderosa, no una idiota, pero me gustaba escuchar a mi padre decir que podía hacer lo que quisiera y que él lo solucionaría, aunque tengo claro que lo puedo solucionar por mi propia cuenta . . .
- Claro papá, disfrutaremos la vida y tu te encargas de todo . . . -
Dijo Fer con una sonrisa tan brillante que el sol que ingresaba por el vidrio quedaba opaco ante su sonrisa . . .
- ¿ Quién dijo que eso aplica para ti ?, solo estoy hablando de mi pequeña hija . . . -
Me rei tan fuerte que pensé que me dolería el estómago, la cara de Fer fue impresionante y ahora su sonrisa la tenía yo, mi padre simplemente era genial . . .
- Esto es injusto . . . -
Mi hermano Fer pensaba bufarle a mi padre, pero el señor Tomás bajo la ventanilla en ese momento para informar que ya habíamos llegado a la mansión Skala . . .
Suspire pesadamente y Fer me saco la lengua . . .
Mi hermano sabía que odiaba ir a la mansión Skala, prefería encontrarme con mis amigos en otro lugar . . .
Sus padres y su tía en espacios me trataban como si fuera una muñeca que se rompería en cualquier momento, me abrazaban tan fuerte que sentía perder peso en solo un abrazo y sus palabras eran tan rebuscadas, que simplemente me daba pereza escuchar . . .
Aunque los apreciaba, muy en el fondo los apreciaba, son personas que de alguna forma me quieren y lo demuestran de una forma muy . . . Pero muy intensa, esa es la palabra . . .
Sin embargo, ya estamos aquí, y Fer es tan desgraciado que sonríe como idiota que es, y se muy bien que solo se está burlando de mí maravillosa suerte y la forma tan perfecta en la que inicie mi día . . .
- No te preocupes, puedes hacer lo que quieras, papá lo resolverá . . . -
Se burló Fer sin piedad de mi, bastaba con ver el brillo en sus ojos azules para saber que la intención estaba en ella . . .
- ¡ Cállate ! - Le di un puñetazo y en ese momento se abrió la puerta para dar paso a la chorreante voz de la tía de mis mejores amigos . . .
- ¡ Niños ! . . .
Que alegría volver a verlos, bueno a ti ya te he visto, pero mi niña, cuánto tiempo te fuiste está vez, mira te fuistes cuando eras apenas una niña, y ahora regresar como toda una mujer, estoy segura que ya hasta estás pensando en casarte . . . -
Me atraganté con mi saliva . . .
¿ Que mierda acababa de decir ? . . .
¿ Acaso esa señora nunca se calla ? . . .
¿ Siquiera está escuchando lo que dice ? . . .
¿ Yo, una mujer, casarme ? . . .
¿ Sabe siquiera cuántos años tengo ? . . .
¡ Dios ! . . .
¿ Por que tuve que venir hasta este lugar ?
Las cosas que tengo que escuchar a mi edad . . .
Agradecí a todos los santos cuando unos ojos verdes como el cesped llegaron y se fijaron en mi, su escaneo fue tan intenso que me sentí incomoda en ese momento . . .
Pedro Skala tenía la misma edad que mi hermano Bobby, pero era uno de mis mejores amigos, me llevaba 6 años de edad, pero era un chico muy agradable y siempre hacía lo que yo quisiera, no le daba vergüenza hacer juntos a mi cosas que supuestamente hacían chicos de mi edad, aunque yo no era muy loca en cuanto a hacer planes, bueno solo un poco, sin embargo, a Pedro nunca le importaba nada y hacía las locas más locas que se me ocurren sin poner peros . . .
- ¡ Mamasita ! . . . -
Solo escuché como me llamo y luego solo sentí sus fuertes brazos rodeando mi cintura y levantándome en el aire como si, vuelvo y lo digo, fuera una muñeca sin peso y sin vida . . .
Su respiración me golpeó en el cuello haciéndome cosquillas y no pude evitar reír a carcajadas, tenía un barba baja que lo hacía lucir guapo y que además me hormiguea y pica por dónde pasa en mi piel . . .
- ¡ Pedro ! . . . -
Exclamé para que me baje y quite su barba de mi cuello, pero en cambio me apretó más a su cuerpo y pude sentir su firme pecho, aunque antes nos habíamos abrazado, nunca me fijé en su estructura corporal, parecía que tenía que empezar a conocer más a mi mejor amigo . . .
¿ Pero que estoy pensando ? . . .
No estoy en la edad de observar esas cosas . . .
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* * * * * ( ACTUALIDAD ) * * * * *
Dreik Black, cerró el diario de golpe, y lo tiró en el escritorio creando un eco sensorial bastante fuerte y aterrador . . .
- ¿ Así que querías conocer más a tu mejor amigo ? . . .
¿ Qué clase de amigo es ese que abraza de esa forma a una niña ? . . .
¡ Joder ! . . .
Le lleva 6 años de edad . . . -
Dreik Black estaba realmente furioso, aunque eso había pasado hace mucho, los celos lo tenían poseído y ahora quería matar a Pedro Skala, no pensaba que él no era muy diferente en la diferencia de edad con su esposa . . .
Claro que conocía a Pedro Skala y habían sido socios por mucho tiempo, pero luego fue dejando los negocios a manos de su hermano, nadie sabe que pasó con él, pero de seguro su esposa si estuvo en contacto con él y debía de saber la razón . . .
Ahora entendía porque ella no quiso invitar a nadie a su boda, de todas formas a Dreik no le importaba cuando se casaron, solo lo hizo como un requisito, solo que ahora sí le daba mucha importancia a esos eventos . . .
Su esposa supo fingir muy bien todo el tiempo, pero ahora descubriría cada uno de los más oscuros secretos que guardaba su esposa y que había confesado en ese diario . . .