El rostro de Caro se distorsionó cuando miro al hombre que casi lo deja sin brazo . . .
- ¿ Pero qué demonios ? . . .
¿ Qué haces aquí ? . . .
¿ Cómo me encontraste ? . . . -
Caro soltó el brazo del hombre de inmediato y lo ayudo a levantarse . . .
- ¿ Eso es lo único que te importa ? . . .
Pensé que eras una chica delicada, tierna e ignorante . . .
Pero me encuentro con un monstruo . . . -
El hombre agarro su brazo, para darse cuenta que era un esguince . . .
Incluso si solo era eso, no podía negar el dolor y la fuerza tan bruta que esa mujer poseía . . .
- ¿ Es mi culpa ? . . .
¿ Estas buscando morir ? . . .
Nadie te pidió que vinieras a esta hora hasta aquí . . .
Además . . .
¿ Cómo sabes de este lugar ? . . . -
Caro lo miro con sospecha . . .
- ¡ Mierda ! . . .
Lo
