La puerta se cierra detrás de mí junto con el pestillo, me guio hasta su mesa en su escritorio y me subí sobre esta. Sus labios abandonaron mis labios y bajaron mi cuello, clavícula, la parte superior de mis pechos hasta llegar a mi v****a. Mi vergüenza desapareció gradualmente mientras nos sumergíamos en el placer y la pasión, lo que más me sorprendía era la persona tan diferente que era Jayden, al que conocía en el pasado. El hombre que anhelaba, amaba y me volvía loca se encontraba agachado devorándome succionaba y me daba placer mientras me miraba con pasión y me acariciaba de forma tierna y afectuosa. Jayden, volvió a besarme acariciando mi cintura para después tomarme entre sus manos y llevarme hasta su silla, él debajo de mí. Fue en ese momento cuando hizo a un lado