Ha pasado una semana desde que mi padre abandono este mundo, no hacía mucho a decir verdad, cocino y me quedo todo los días en la cama. Mi celular esta a punto de explotar a causa de las incesantes llamadas de Jayden, Benjamín y Rachel. Lo que hice fue enviar mi renuncia, y gracias al cielo Jayden no esta para evitar mi decisión. En ese momento me doy cuenta de que son las 4:30 de la tarde y alguien toca mi timbre como si fuese un loco. A regaña dientes me levanto de la cama y camino hacía la puerta encontrándome con Rachel. —Eres una mala mejor amiga, ¿por qué me haces a un lado? Sin permiso alguno, como siempre, entra a mi casa y me mira asustada al ver lo desordenada que es. En ese momento ella empieza a limpiar mientras yo me apoyaba en la pared. —¿Qué paso en el viaje? —Mi burb

