Brigitte Desperté y cuando miré el reloj no podía creerlo. Había dormido unas quince horas de corrido. Comí algo y me vestí para ir a verte al hospital. Los besos y abrazos de los últimos días, así como las miradas que me propinabas, me hacían pensar de nuevo que todo era posible. Por eso, camino hasta tu transitorio hogar, decidí volver a Nueva York para acabar con todo. Acabar con mis contratos, pues me quedaban solo nos días con cada uno. El reinado por fin acababa y mi carrera perfectamente la podía hacer en Francia y viajar. Mucho, pero viviría cerca de ti. Y por supuesto, decidí dejar a Ron. Te debo confesar que llegué muy alegre y tal vez ese fue mi error. Pero lo que había decidido y aparecer frente a ti vestida con algo más sexy que lo que me habías visto esos días donde no do