Meses atrás —¿Papito si te dejó venir?— El tono burlesco de Oscar me calento las pelotas pero también me divirtió. Lo atraje hacia a mi para sobarle la calva que tenía. El muy idiota se había rapado, ahora era la burla de mis amigos. —Tú que crees pedazo de idiota— Me reí. Steven no me había dado permiso de venir, de hecho me lo prohibió pero como yo no soy uno de sus títeres, sus órdenes me las paso por donde defecó todas las mañanas. Oscar , era uno de mis amigos, él tenía pocas neuronas y solo pensaba con la pequeña polla que tenía. Se la pasaba haciendo fiestas que ponían de cabeza la residencia de sus padres. La música sonaba en su máxima potencia haciendo temblar los ventanales de su casa. —Vamos rubia, solo faltabas tú — Le di un golpe brusco en su brazo. Me zurraba que me ll