[CIAN]
Jamás pensé que aquellas horas en el yate, fueran a cambiar tanto el curso de mi vida. Es extraño darme cuenta de que estoy enamorado de Grecia de esta manera tan repentina e inesperada. Había planeado toda mi vida con una mujer, pero las cosas cambiaron y cuando creí que en cuestiones del amor todo me iría mal, llego ella.
En el momento que los dos abordamos mi avión para ir a Madrid, debí darme cuenta de que sería imposible no enamorarme de ella, «¿en que cabeza cabe que una mujer como ella no sacuda tu mundo? Quise hacerme el desentendido, pero obviamente no funciono, y ahora estoy aquí recorriendo las calles de Mónaco de noche, tomado de su mano.
La miro y me doy cuenta de que no se parece en nada a ninguna mujer de las que pasaron por mi vida, y no me refiero en el aspecto
