Me despierto y el lugar a mi lado está vacío. Suspiro, esto no empezó para nada bien. Intento escuchar si está en el baño, pero no oigo ni un sonido. Miro la pantalla de mi celular, son las ocho de la mañana. Me incorporo con lentitud y bostezo, dormí poco y nada por la preocupación, pero escuché a Rodrigo roncar con todo. Me pongo un vestido, voy al baño para prepararme y luego voy hacia la sala. Él debe estar en la cocina, quizás preparando el desayuno. —Te lo juro, hay una chica en mi habitación. —Escucho justo antes de entrar al living. Me quedo detrás de la puerta para escuchar mejor—. ¡Tengo miedo de lo que hice, Sebastián! Apenas recuerdo cuando entré a tu auto... —Se queda en silencio. ¿Está hablando con mi hermano?—. ¿Estás seguro de que no traía a nadie conmigo? —Bufa—. Está b

