No sé cuánto tiempo llevo acostado mirando al techo de mi habitación, hace un rato mi hermana estuvo aquí conmigo tratando de hacerme reaccionar, pero no puedo, simplemente no puedo, solo pensar en Nort hace que el pecho me duela. Las palabras de la doctora se repiten y de repiten en mi cabeza hasta que decido, me visto rápidamente y salgo de la habitación, voy al garaje y me subo a mi auto para después salir a toda velocidad de la casa se mis padres. Veo la hora y me sorprende ver que son las dos y cuarto de la madrugada. Conduzco a toda velocidad por la ciudad sin importarme si puedo ganarme una multa. Siento las lágrimas picar en mis ojos mientras conduzco sin rumbo fijo. Amo a Nort, la amo demasiado y no soy capaz de imaginar una vida sin ella, prefiero mil veces que ella me odie, per

