- sueltame- le digo y lentamente va alejando su mano de mi boca. Pero sin alejarse de mi cuerpo. Pone cada mano a la altura de mi cabeza. - ¡acaso quieres matarme de un susto! - le digo molesta- es la segunda vez que me haces esto - le digo y rueda los ojos. - cállate. - me dice con firmeza lo miro fulminante- me das dolor de cabeza- me gruñe - que mala costumbre.-le reprochó- Mandando a callar a las personas- le digo tratando de salir de ahí.- que haces aquí?- le pregunto sería. -solo pasaba por aquí y dije oh es la monjita ¿porque no saludarla?- dice con sarcasmo. - primero deja de decirme así. Me enferma- murmuro molesta- Dos el sarcasmo no parece lo tuyo. Tres y última ¿que haces aquí?- le pregunto irritada. - nena todo es lo mío- me dice coqueto mientras me Quiña el ojo. Rue