Dos meses después Nuestra vida se había convertido en una locura, salir de aquel lugar sin un solo centavo fue muy mala idea, tal como lo supuse, nunca aparecí en las noticias como que me estaban buscando, así que vivía una vida bastante tranquila. Vivíamos en un pequeño apartamento en uno de los barrios marginados de aquí, jamás en mi vida pensé que iba a vivir en ese tipo de sitio. Hoy, justamente cumplía 19 años, ciertamente me hacía sentir diferente, en especial que ahora estaba oficialmente embarazada. Todavía recuerdo cuando todo ello dejo de ser una simple hipótesis para ser la realidad. Un mes antes La cita donde la ginecóloga me tenía comiéndome las uñas, estaba a punto de confirmar lo que ya casi que estaba segura de que era verdad. —Aria Johnson —Me llama la ginecóloga des