24 de diciembre, 2017 Estoy ansioso por descubrir la reacción de mi familia cuando conozcan a Allegra. Observo a mi guapísima esposa, quien lleva puesto un vestido largo color n***o que hace resaltar su ya más notoria barriga de 18 semanas bajar la escalera de la mano de nuestra pequeña princesa. Ella también lleva un vestido color n***o y es muy parecido al de su madre. Son tan parecidas que de verdad muchas veces creo que también es la sangre la que las une. —Se ven preciosas.— Digo y les ayudo a bajar el último escalón. —Gracias papi.— Dice la pequeña haciendo que ambos riamos. Mi esposa me mira sonriente –Gracias papi.— Dice ella también y no puedo más que reírme de sus palabras. —Mejor vayamos...— Propongo antes de que esto termine en un espectáculo no apto para menores. Salimos