Killian Khemver Observo a Ailén plenamente dormida en la camilla, respira lento y pausado, tiene unos alambres en ma nariz que la ayudan a respirar, hay mas cables conectados a su cuerpo, sus labios rosados, jugosos y tentativos se encuentran hinchados, perfectos para poder besar, aunque algo secos, me preguntó si le han dado el cuidado que merece. Aunque no me sorprende si no lo han hecho, Cian, siendo el mediocre que es no se podría dar el lujo de cuidar mejor de esta hermosa Diosa, Ninfa de aguas termales, sus ojos verdes esmeraldas, con esa piel hermosa y aceitunada, con la delicadeza de una Diosa, y ese cabello tan largo hasta su cintura, es una mujer hermosa. La veo y lo entiendo, yo también daría mi vida por ella y no sabe cuánto la odio por eso. Tiene múltiples cortadas por su