[MATEO] Al día siguiente: 22 de septiembre Salir de este cuarto no ha sido una opción en el día de ayer, y es que ni ella ni yo fuimos capaces de dejar esta cama, y no sé si es por todo lo que estamos sintiendo, o por la conexión que tenemos. La veo moviéndose a mi lado mientras que se despierta, y la imagen es alucinante. Su cabello cae de manera desordenada por su espalda y la sábana que la cubría se desliza en su cuerpo hasta destaparla completamente y dejarme ver esos lunares que tiene en su espalda y tanto me gustan. —Buenos días— Saluda un poco cansada y sonrío. —Buenos días, ¿qué tal has descansado?—Le pregunto haciéndole un espacio sobre mi pecho para que ella se acomode. La veo morderse el labio inferior y el gesto es provocativo —Si te digo que me duele todo el cuerpo com