EMIR - tú no vas a decir nada - le digo con seriedad y ella niega molesta - si decides dejarme entonces no me va a importar contarle toda la verdad a tu esposa - dice ella con seriedad y yo niego con la cabeza porque siempre es lo mismo camino hacia ella y la tomo con fuerza del cuello y la aprieto con mucha fuerza hasta que no puede respirar - a ti como que se te olvido que conmigo no se juega, se te olvido que no me puedes amenazar - le digo y no se defiende - si me matas no me importa, igual alguien más sabe la verdad y se la dirá de todas formas - asegura y la suelto - ¿por qué te gusta jugar con fuego? - le pregunto soltándola - ¿a quién le constaste? - le pregunto enojado - no te diré a quien le conté, lo único que te voy a decir es que si algo me pasa entonces esa pers