Capítulo 4

2818 Palabras

CAPÍTULO CUATRO Durante los siguientes dos días no dejo de pensar en que casi me pierdo en el bosque, en la extraña forma de actuar de todo el mundo y en lo que sea que se esconde detrás de la arboleda. Durante el resto del tiempo, sin embargo, me distraigo ayudando a la abuela y a Willa a preparar las habichuelas. Al terminar, tres docenas de tarros llenos descansan sobre la encimera y esperan a que Billy y yo los llevemos a la bodega, donde se quedarán junto a la mermelada de fresa que enlatamos a principios de este verano y el puñado de tarros de tomates y remolachas que quedaron del año pasado. —Bueno, por fin terminamos —exclama Willa. Se acerca a la salida de ventilación de la nevera para que el aire frío le suba la blusa. —Deidra Ann, ¿te importaría servirnos a tu abuela y a mí va

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR