La vida hay que vivirla cada día, cada minuto. No podemos perder el tiempo en cosas que no tienen importancia. Los segundos pasan, los minutos corren y la vida se te va sin que te des cuenta. Vive y disfruta de cada momento como si fuera el único. Disfruta del viento, del piar de los pájaros, de la gente, de las cervezas entre amigos, de las batallas de tu abuelo, de la sonrisa de tu abuela, del consejo de tus padres. Porque quizás, algún día, la vida te quité todo eso de repente. Así que, me encargo de disfrutar cada momento a pesar de que estoy cansada. El bar me tiene un poco quemada pero siempre sirvo a todos con una sonrisa y hablo con quién me saca conversación. Se aprende mucho y todas esas batallas que me cuentan, o las clases de historia que me dan, me lo lle

