| Audrey Letterman | Sus ojos celestes están algo oscuros. ― Me negué a siquiera pensar en que un nosostros no funcionaría y que nada entre el y yo podría funcionar, puedes estar tranquilo. Besa mi cuello, no de forma casta sino apasionada e intensa, sus dientes hacen el mismo contacto que su lengua y succión jadeo alzandome un poco entre sus brazos aprieta mis glúteos impidiendo me mueva. ― Haremos que esto funcione Audrey, no debes dudar nunca de eso... ― ¿Y sino funciona? ― pregunto con la respiración pesada. Sus labios aún rozan mi cuello. ― El divorcio no te lo pienso dar ― espeta tenso. Sonrió sacando su rostro de mi cuello. ― ¿Si sabes que puedo quedar viuda? ― bromeo. ― ¿En qué otro lugar conseguirias tres esposos? ― interroga alzando la ceja. ― Tendrán que visitarme de