Fadyx Mayken
Golpeó a Grax una y otra vez mientras los gritos de Vener casi revientan mis tímpanos.
— ¡Más fuerte! ¡Más fuerte!
— ¡Puedo lastimarlo!
— Hasta el momento siento que me golpea una bebé — se burla Grax.
— Estás siendo muy suave Fadyx — regaña mi padre Ciro.
Me detengo por un segundo tomando un profundo respiro, me causa gracia como Grax parece una gran almohada.
— Sino le duele no estás haciendo bien tu trabajo — dice mi padre Drean.
Desde que hablé con ellos sobre lo que ella dijo me tienen entrenando por largas cuatro horas diarias en la mañana, y por las tardes dos horas con armas.
Sin pensarlo más suelto un golpe fuerte Pero moderado director al abdomen, empujó con fuerza su intento de defensa con la otra mano y doy más golpes igual de fuertes que lo hacen retroced
