…. - No, fui su esposa durante dos años – sus palabras son como un puñal en mi pecho – cuando desperté, no recordaba nada y él me hizo creer su historia. - ¿Qué historia? – pregunto sintiendo como la sangre me hierve al darme cuenta de la magnitud de lo implica lo que acaba de decir, pero trato de calmarme. - Que llevamos tiempo casados – responde con los ojos llenos de lágrimas observándome – perdóname – me levanto de golpe yendo hasta ella viendo como Marcel se pone en alerta, pero yo la abrazo – Lo siento – vuelve a decir rompiendo en llanto y sé que no fue su culpa lo que sucedió. - No importa – hablo besando su frente mientras respiro su aroma calmándome al instante. me separo de ella poniéndome a su lado tomando su mano para que continúe. - H