Michael estaba muy interesado en conocer qué habían dicho los familiares del alcalde, pero sobre todo quería saber si habían hecho sentir mal a Shelly de algún modo. La petición que el alcalde le había hecho a Michael era una perfecta oportunidad para consolidar su amor por Shelly y él no quería que se arruinara por culpa de otras personas. Una vez dentro del auto de Michael, Betty se quedó rápidamente dormida, pues ya se encontraba muy cansada. Con ella descansando, Shelly sintió la confianza de comenzar a hablar con Michael y contarle todo lo que había escuchado. ―Ese señor que llegó con Rose, ¿sabes qué es del alcalde?... Parecía como si buscara controlar parte de la vida del alcalde ―opinó Shelly. ―Sí, bueno, se trata del director del hospital, es quien

