Increíble Narra Charlie Me despierto en medio de una habitación desconocida para mí y estoy un tanto desorientado. Recuerdos de la noche anterior vienen a mi mente, mi llegada a la ciudad, la búsqueda de Olivia y el beso… Ese maldito beso que me quebró por completo. El frío calaba en mis huesos, pero tuve la suerte de haberme encontrado a Anna en el camino. —Buenos días dormilón. Feliz Navidad. —volteo a verla y la veo en una bata de baño y con una toalla se está secando el cabello, la vergüenza me invade y volteó hacia otro lado de forma inmediata— ¿Cómo te sientes? Recuerdo los cuidados que tuvo conmigo anoche, vigilando que no subiera aún más mi temperatura y dándome medicamentos. Sino fuese por ella, tuviese una severa neumonía. Aún mirando fijamente para la ventana y evitan