Un año después… Al volver a Roma luego de otro fin de semana romántico en alguna isla del Mediterráneo, Dante Ricci una vez más me había dejado el mensaje con la secretaría de recepción, de que me esperaba en su oficina. De pronto sentí un grandísimo deja vú de lo que había sido el retorno de Grecia, cuando se enteró que Rafael y yo éramos pareja y que además él hacía tiempo que no le pasaba detalle real sobre mis movimientos. Desde entonces su relación con nosotros había sido bastante distante, así que esperaba cualquier cosa para esa repentina reunión… Dante Ricci - ¡Seré breve! Esta noche partes a París con mí… (Miró al suelo) ¡Con Fabrizio! Letizia - ¡Con tu hijo! (me miró fijamente y comprendí que pretendía que me callara, para seguir hablando)… Dante Ricci – Necesito un fa