Una semana después. Noah Me levanto de un humor increíblemente insoportable, no había parado de nevar en toda la malidta semana y las constantes pesadillas por las noches me hacían los días aun peor, hace años que no tenía una pesadilla. Tomo mi móvil y maldigo, no había cobertura, tenía que llamar a Camilo o a James, quería llamar a Lucy y decirle que la amo, que estaré con ella lo más pronto posible, pero la suerte no estaba de mi lado. -Noah baja a desayunar. -grita mi madre Bajo sin muchas ganas, solo quería irme, tener a mi Lucy, abrazarla, besarla, sentir su piel, sus manos, sus labios. -Noah hemos decidido viajar a los ángeles -anuncia mi padre sacándome de mis pensamientos. -Es muy riesgoso con el clima así. -susurro. -Lo sabemos, es por eso que hemos pedido ayuda. -añ