Puede que por causa de la culpa me quede dormida, no sé en qué momento paso pero aquel sueño me llevo en la profundidad de un bosque desconocido, la espesa bruma me impedía ver con claridad. Logre ver después de algunos segundos una gran luz, era segadora pero comprendí que era el destino que proclamaba mi nombre, como unas campanadas que hacían eco en mi cabeza. La brillante luz me mostró que al final del bosque se encontraba un valle repleto de cuerpos, tenían apariencia humana pero el sol revelaba su verdadera forma “Vampiros”.
Hombres, mujeres y niños estaban tendidos en el suelo, sus cuerpos eran consumidos por las llamas del sol, los pedazos de su piel quemada flotaban a mí alrededor, el olor a carne era terriblemente asqueroso. No podía dar crédito a lo que mis ojos veían ¿Este era
