Hannah:
Yuri gruñó y se puso enfrente de mi y de Gea.
—Es nuestra— afirmé.
Dos sujetos empezaron a tomar su forma de lobo y yo me sentí un poco asustada, ya me había enfrentado a lobos, pero… no era lo mismo que pelear con alguien cualquiera, una mordida de lobo dolía como el carajo, en especial si tenías sangre de híbrida, la infección duraba semanas.
—En las reglas, no dice nada de no pelear por una— dijo aquel tipo y también tomó su forma de lobo, Gea me miró y yo solo retrocedí.
—Esto es una búsqueda, no una confrontación— dijo Gea.
Aquellos tres lobos gruñían y mostraban sus filosos dientes. No nos iban a dejar ir.
—Hannah… que no te muerdan — susurró Gea.
—Bien.
Yo salí corriendo y escuché los gruñidos detrás de mi. No podía voltear y ayudar a Yuri, sabía que Gea pod
