Capítulo 34

1894 Palabras

Los camareros comienzan a servir las entradas: pequeños platillos adornados con exquisiteces gourmet. Mi mirada se posa en lo que parece ser una combinación artística de mariscos y salsas, como si fuera algo creado por un pintor de la época. Parece lindo y rico a la vista, pero mi estómago no parece muy feliz. —¡Ah, qué presentación tan encantadora! —exclama María, mirando su plato con admiración. Alejandro asiente con una sonrisa, pero yo no puedo evitar fruncir el ceño ante el tamaño minúsculo de la porción. ¿En serio esto es suficiente para una entrada? Mi apetito está lejos de estar satisfecho. —Es una creación del chef local, es conocido por sus platos sofisticados y su presentación artística —explica Carlos, probablemente notando mi expresión. Hago un intento por probar los mari

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR