Noah . . .
La tengo en mis brazos y su dulce aroma me vuelve loco, soñe con esto desde el primer día que la mire, soñe con tenerla en mis brazos y besar sus rojos labios, tan sabrosos como lo imagine, sus ojos me miraron con ternura, y yo la pego con ganas, sentí que se rindió ante mí y eso me pone demaciado, dejo que explore su boca, su bendita y deliciosa boca . . .
¡ Dios es tan deliciosa !
La urgencia me puede y le ordeno prácticamente que suba al coche, la llevaré a un lugar al que no he llevado a nadie aún, no me aguanto al ver que se agacha y planto mi mano sobre su enorme glúteo . . .
¡ Uff, maldición esta tan buena !
Esa sensación sabrosa quedo en la palma de mi mano ahora tengo mas urgencia de hacerla mía, ella grito mi nombre y eso fue el fuego que me incendio, su voz
