Zafiro... Acaricio mi pequeño vientre distraída mientras observo la ciudad de Los Ángeles, el día esta bellísimo, aunque en este momento quisiera estar junto a mi esposo pero el inconveniente en la tienda requería de mi atención. No puedo creer que mi vida sea así de perfecta, los últimos tres meses han sido como de ensueño junto a mi esposo. Esta etapa que estamos viviendo es maravillosa, aunque en realidad no he sentido muchos de los síntomas que debería durante el embarazo. En un principio me preocupo, pero la doctora dijo que era normal, no todas las mujeres reaccionan igual. Salgo de mis pensamientos cuando aparece en lo campo de visión la tienda, por lo que hago a un lado mis pensamientos respecto a mi familia para concentrarme en un proyecto que considero mi segundo hijo. El aut