Pueden llegar a pensar que viajar y estar al lado de Pablo del Moral es una de las cosas más divertidas y emocionantes del mundo, pero debo decirles que se equivocan, es más aburrido que estar despierto a las 7:00 am en casa ajena esperando a que todos se levanten. Sí, he paseado por toda España, pero no he salido. Una razón es porque Mar aún no puede andar en la calle por lo que acaba de pasar y dos, porque Del Moral quiere todo a su manera y básicamente me lo ha prohibido, así que aquí estoy contando los patrones de la alfombra de la habitación, mientras Mar se echa la siesta de su vida. Debo admitir que el plan de Pablo a funcionado bastante y me ha permitido descansar un poco más. El hombre es disciplinado, llega del trabajo, entra a la habitación, saluda a Mar, si aún no está ducha