[SEBASTIEN] Rocío y yo, ya estamos más que listos para entrar a la piscina, pero, Zami ha tenido que ir a cambiarse y de paso cambiar a Nico. Me siento en la tumbona al lado de mi madre y observo como mi hija disfruta de la piscina junto a sus dos primos. Alejandra, se sienta en la otra tumbona a mi lado con Bruno en brazos y también disfruta de la escena que hay en la piscina. —Cuñadito, tu hija es igualita a ti. — Me dice con una enorme sonrisa y niego. —No Ale, mi hija tiene la mirada de su madre, además, se parece en muchísimas cosas a ella cuanto tenía su edad. — Contradigo con orgullo. —Y muchas cosas de ti Sebastien. — Intercede mi madre entre risas. —¿Sí?— Pregunto un poco confundido. —Si hijo, se la pasa escribiendo, me recuerda cuando tu tenias su edad y te la pasabas con