— Lo siento pero me da tanta pena verte marchar –agregó Carolina secando sus lágrimas- — ¡Tonta! Solo serán dos semanas, es mi luna de miel –contestó Annie con una sonrisa de oreja a oreja La boda de los castaños se realizó tan solo después de tres meses de anunciar su compromiso, eran dos locos desesperadamente enamorados. — ¿A dónde se van? –preguntó tomando de sus manos- no quiero que regreses sino vienes con la noticia que seré tía – — Nos decidimos por ir a Grecia y… nos veremos en unas semanas con la gran noticia–comenta feliz, emocionada — Ya no sé si quiero que sea tan pronto –comentó con pena Caro causando que la castaña ponga los ojos en blanco– Es que… no sé… me gustaría que nuestros hijos crezcan juntos — Fácil, dejarás de cuidarte y podrás tener un hijo con Antonio –

