Al visitar nuestra página, si da su consentimiento, usaremos cookies que nos permiten recopilar información estadística agregada para mejorar nuestro servicio y recordar sus elecciones en futuras visitas. Política de Cookies & Política de Privacidad
Estimado Lector, necesitamos cookies para mantener el funcionamiento de nuestro sitio web sin problemas y proveerle contenido personalizado que satisfaga sus necesidades, para asegurarle la mejor experiencia de lectura. Puede cambiar los permisos para las siguientes configuraciones de cookies cuando lo desee.
If you would like to learn more about our Cookie, you can click on Privacy Policy.
Kayda Dabria Tenso mi agarre alrededor del cubierto mientras los observo bajar por las escaleras, tranquilamente, después de ayer, hoy esperaba no verlos más, no salí de mi habitación y preferí dormir, me siento realmente vulnerable con unos locos queriendo matarme y ellos aquí. — ¿Porque no se han ido aún?!— inquiero tomando un poco de jugo de piña. Mi favorito. Andreus sonríe casi de forma imperceptible, es cínico cuando lo hace. — Su padre nos dejó como responsable de su seguridad señorita Dabria — Leonid habla captando mi atención. Juntos son aún más intimidantes, son hombres grandes. — Si, eso era antes de saber que uno de ustedes puede acabar con mi vida, ya tengo muchos de esos detrás de mi, no me voy a arriesgar a vivir bajo el mismo techo con uno — aclaro poniéndome de pie

