—Hombros hacia atrás, pelvis ligeramente hacia adelante y la espalda recta pero que no se vea tensa —puse mis manos en sus hombros para que los tirara hacia atrás—. Ahora camina con paso firme, manteniendo la postura en todo momento y con pasos idénticos, que no se vean unos más largos que otros —caminó hacia su habitación y volvió al cuarto de estar. —Me sale como la mierda, Alyssa —bufó con cansancio. Golpeé su pecho y puse mis manos sobre sus mejillas para levantarle un poco la cabeza. —La cabeza debe estar siempre elevada, recta. Mirando al frente —asintió, caminé hacia su habitación y subí el tono de voz para que me escuchara desde el living—. Mantén la mirada fija en mí y camina con confianza y seguridad. Caminó hacia mí y chillé saltando sobre él para abrazarlo. —¡Te salió muy b