Mientras caminábamos al edificio de chicos por los jardines del internado, nos mantuvimos en silencio simplemente disfrutando de nuestra compañía. Sé que me arrepentiré pero…-Está bien, te daré una oportunidad, demuéstrame que si puedes cambiar- Le digo deteniéndome en seco. Matt sonríe con los ojos cerrados y asiente. La brisa de la noche impacta contra mi cuerpo causándome frío y haciéndome temblar un poco. Matt me mira y toca mi brazo. -Te estás congelando ¿Por qué no me dijisteis que tenías frio?-acto seguido se quita la chaqueta y la pone sobre mis hombros y me abraza. Esto es tan cliché pero me encanta, no me molestaría que Matt fuese así siempre. -Gracias - le sonrío y beso su mejilla. Luego seguimos caminando hasta llegar al ascensor, al entrar los recuerdos vienen a mí, de